Visitamos la exposición de Farreras en la galería Lucía Mendoza.
La obra de Francisco Farreras (Barcelona, 1927) supone un diálogo con la materia, con la composición y con la geometría. Partiendo de elementos encontrados, Farreras realiza unas composiciones geométricas (en su mayoría sobre tabla) sencillas pero equilibradas, que aunque nada tengan que ver unas con otras, funcionan a la perfección entre ellas.
Destaca la distribución por la sala, combinando obras de gran formato (como la que encabeza este artículo, “Nº 1058A”) con otras más pequeñas y sutiles, que funcionan igual de bien y logran un delicado equilibrio entre el tamaño y el relieve.
En la muestra, que permanecerá hasta el 25 de abril, Farreras presenta obras nunca expuestas, en las que acerca su manera de ver el arte, sus vías de composición, su poética y su sentido del equilibrio formal al público, y es que es intención del propio artista que las piezas hablen por sí mismas, y que no sea necesaria una guía conceptual detrás.